Estallido de fe
deslumbrante.
Surge la
pregunta:
¿Por qué pisamos aquí?
¿Por qué somos bípedos?
Los Ángeles
se llevaron
en vuelo huracanado,
mi nombre a otro confín…
al silencio.
Las horas se llevaron…
lo mejor de mi tiempo.
No encuentro respuesta
a mis preguntas.
Lejano siento
gemido terso de mujer,
donde sorbí el primer calostro
y aprendí el reposo.
Espero…dardo afilado
en mi pecho
vulnerable y lampiño.
Terminará mi
vida
como terminan todas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario